Debo vs Quiero
¡Cuán a menudo pronunciamos esta frase! No quiero hacer esto pero debo hacerlo, no quiero ir al dentista pero debo hacerlo, no quiero hacer las tareas pero es necesario... ¿Y cuánto debería hacer hoy? ¿Y mañana? ¿Y cuántos de esos "debo" no se hacen o retrasan para mañana, para más tarde y a menudo por un tiempo indefinido?
Más tarde o después es lo mismo que mañana. ¿Alguna vez has visto "el mañana"? debería llegar en la mañana siguiente, pero nos despertamos y ¿dónde estamos? ¡Otra vez en el "hoy"! Y otra vez hay mil cosas que deberíamos hacer y los dejamos para… mañana
Imagínate la siguiente escena: trabajo acumulado, la casa un desastre, el grifo gotea, nevera vacía, la cena sin hacer... (y más cosas que tu sabes, mira a tu alrededor) y vas dando rodeos por la casa, y tanta cosa sin hacer, y te cansa solo de pensarlo… lo dejas para más tarde. Pero quieres comer, y a través de "no quiero" empiezas a lavar los platos, cocinar la cena, o arreglar algo...
Como resultado, una pérdida completa de fuerza, la comida cocinada no trae alegría, el trabajo hecho ya no inspira... ¿Y por qué? Pues porque todo se hizo a través de “No quiero o debo”.
Recuerda cuántas maravillosas intenciones fueron "enterradas" después de identificarlas con la palabra “No quiero o debo”. Debo ir al gimnasio, tal vez una vez lo hago pero al final me rindo. Es necesario estudiar o aprender un idioma, no aprendí. Debo ponerme a dieta, está bien, mañana comenzaré y hoy comeré algunos pastelitos por última vez…
Date cuenta de que cuando dices, "Tengo que hacerlo", todo el deseo de hacer algo muere en el intento. Reconoce que cuando dices "debo", estás matando a tus ganas de actuar.
En pocas palabras "debo" paraliza nuestra motivación, ya que no queremos hacer nada por la fuerza, incluso si es por nuestro propio bien. Por supuesto, hay cosas que se deben hacer. Pero recuerda que las palabras tienen un gran poder. Tus pensamientos y palabras crean el mundo que te rodea. Un "debo" te frena en el camino hacia tus objetivos.
¿Qué hacemos con las cosas que tenemos que hacer, pero no queremos? Hay una manera, muy fácil, y casi mágica. Compruébalo por ti mismo/a. Te prometo, una vez que comiences a realizar esta técnica - tu vida será más fácil y más feliz.
¡Reemplaza la palabra “DEBO” por la palabra "QUIERO"!
En este momento, piensa: cuando dices "Tengo que hacer..." ¿Qué sentimientos surgen? ¿Cómo reacciona el cuerpo? ¿Hay una sensación de rechazo, el cuerpo se vuelve demasiado perezoso para moverse? Y ahora piensa "¡Quiero hacerlo!" ¿Qué sientes? Entusiasmo, motivación, el cuerpo quiere saltar de alegría. LO QUIERO es ¡divertido y alegre! Esto es un anticipo de algo bueno, como la expectativa de un regalo en la infancia... Inmediatamente viene la creatividad y surgen las ideas, cómo este asunto puede hacerse aún más interesante. Ahora con esta palabra crearemos magia.
Cuando planifiques lo que tienes que hacer, dilo a ti mismo: "¿Quiero hacer esto? ¡¡QUIERO!!! "
Al principio te será muy raro pensar así y a menudo te vas a deslizar hacia la palabra “Debo”. Este es un hábito que es fácil de eliminar, si controlamos lo que hacemos, y no estamos en el estado de autopiloto la mayor parte del tiempo. Si dedicas un poco de tu tiempo a esto, un nuevo hábito se instalará muy rápidamente en tu vida.
Si estás listo/a puedes comenzar ahora mismo (y de hecho es mejor empezar de inmediato), toma un lápiz y papel para hacer un simple ejercicio para ayudarte a ver las áreas de tu vida en las que te obligas a hacer algo a través de la palabra “Debo”.
En una hoja escribe todo lo que necesitas y lo que debes hacer. No te apresures, escribe todo lo que recuerdes. Y ahora la segunda etapa del ejercicio: toma un bolígrafo de un color diferente, por ejemplo, verde o rojo, y tacha todas las palabras “debo” y justo encima de ellas, ¡escribe la palabra mágica “QUIERO!” ¡Haz este ejercicio con alegría, como lo hacen los niños! Que alegría: ¡ahora harás estas cosas con placer! Y no puedes esperar para hacerlos…
A partir de ahora, tan pronto como aparece un pensamiento tipo "Tengo que hacer esto", cambia inmediatamente a "Quiero hacerlo".
Aquí radica la magia. Sin varita mágica. Hazlo como si fuera un juego y diviértete. Puedes transformar tu vida y el mejor momento para comenzar - ¡AHORA MISMO!
¡Buena suerte!